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La hiperglucemia es cuando los niveles de glucosa en sangre son elevados, se recomienda hacer una prueba de glucómetro y contactar con tu médico para tomar medidas lo antes posible.

Evitar la hiperglucemia es uno de los retos de vivir con Diabetes, pero para afrontar este desafío es importante conocer qué es, cuáles son los síntomas y cómo regresar a un rango normal nuestros niveles de glucosa. Y justamente esto abordaremos en este artículo, sigue leyendo para descubrirlo. Además, es crucial controlar la glucemia para prevenir complicaciones a largo plazo.

¿Qué es la hiperglucemia?

La hiperglucemia aparece cuando los niveles de glucosa en sangre se encuentran elevados, si el médico da este diagnóstico, significa que se requiere algún ajuste en la dieta, rutina de ejercicio o dosis de medicamento, según sea el caso. La cantidad de glucosa en sangre es un factor crucial para determinar el tratamiento adecuado.

Sin embargo, esta alza en el nivel de glucosa también puede deberse al consumo reciente de algún alimento alto en carbohidratos, por lo que antes de tomar cualquier acción es importante consultar a su médico y hacer una prueba con glucómetro para conocer el rango exacto de azúcar en sangre.

Además, la hiperglucemia no controlada puede llevar a complicaciones graves como la cetoacidosis, que requiere atención médica inmediata.

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Causas y factores de riesgo

La hiperglucemia puede ser desencadenada por una variedad de factores. Entre las causas más comunes se encuentran la falta de insulina o la resistencia a la insulina, condiciones típicas en personas con diabetes tipo 1 y tipo 2. Además, una dieta alta en hidratos de carbono y azúcares, junto con un estilo de vida sedentario, pueden elevar los niveles de glucosa en sangre.

Otros factores de riesgo incluyen la falta de ejercicio regular, el uso inadecuado de medicamentos, la edad avanzada, la obesidad y una historia familiar de diabetes. La presión arterial alta y problemas de salud previos también pueden contribuir a la aparición de hiperglucemia. Es importante recordar que la hiperglucemia puede ser el resultado de una combinación de estos factores, y cada persona puede tener un riesgo diferente de desarrollarla.

Síntomas de los niveles de glucosa altos

Uno de los primeros síntomas de la hiperglucemia es el aumento de la sensación de sed, incremento en las ganas de orinar, aumento notable en el apetito y pérdida de peso pese a las mayores ganas de comer. En condiciones de hiperglucemia, el cuerpo puede comenzar a descomponer grasa como fuente de energía, generando cetonas que pueden resultar dañinas.

Otros síntomas son infecciones, mala cicatrización de heridas, sensación de picor, adormecimiento de las extremidades (brazos y piernas), entre otros. Si ha notado que presenta uno o más de estos síntomas, se recomienda hacer una prueba con glucómetro y contactar a su médico para tomar acción cuanto antes.

¿Presentas alguno de estos síntomas? Es momento de ponerte en contacto con nuestros especialistas.

Diagnóstico y evaluación médica

El diagnóstico de la hiperglucemia se realiza principalmente mediante la medición de los niveles de glucosa en sangre. Los niveles normales de glucosa en sangre suelen oscilar entre 70 y 110 mg/dL, aunque pueden variar según la edad y el estado de salud de la persona.

La evaluación médica para la hiperglucemia incluye varias etapas. Primero, se mide la glucosa en sangre para determinar si los niveles están elevados. Luego, se revisa la historia médica del paciente y su dieta para identificar posibles causas subyacentes. También se evalúan los síntomas y signos de hiperglucemia, como sed excesiva, aumento de la micción y pérdida de peso inexplicada. Finalmente, se pueden realizar pruebas de laboratorio adicionales para identificar la causa específica de la hiperglucemia y planificar el tratamiento adecuado.

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¿Qué hacer cuando tengo hiperglucemia?

Ya sea por una lectura de síntomas o medición con glucómetro que evidencien niveles anormales de glucosa, es importante acudir con su médico y no automedicarse, ya que el mal uso de fármacos puede empeorar su estado y dañar su salud.

Asimismo, es importante vigilar la alimentación y retomar el hábito del ejercicio, pues eso evitará que esta condición empeore. Para las personas que tienen Diabetes, la Asociación Americana de la Diabetes suele recomendar los siguientes niveles de glucosa en la sangre:

  • Entre 80 y 130 mg/dL (4,4 y 7,2 mmol/L) antes de las comidas.

  • Menos de 180 mg/dL (10 mmol/L) dos horas después de las comidas.

Además, es crucial controlar las cantidades de insulina y cetonas en sangre para prevenir complicaciones graves como la cetoacidosis diabética.

Si la medición de glucosa indica que se encuentra por encima de los rangos antes mencionados, el tratamiento en casa puede incluir:

Actividad física

Moverse ayuda a nivelar el azúcar en sangre, algunas actividades recomendadas son: caminata, ciclismo, natación, pilates o hasta yoga. Muchos de estos deportes pueden practicarse con poco o ningún equipo especial y hay diversos canales de YouTube con rutinas gratuitas y de bajo impacto.

Respetar el tratamiento para hiperglucemia del médico

En muchas ocasiones, la hiperglucemia aparece porque quienes viven con Diabetes olvidan tomar su medicamento o no lo hacen en el tiempo que indicó el médico. Se requiere disciplina y organización con recordatorios, notas en calendario o hasta alarmas en el celular para reducir la posibilidad de olvidar la toma.

Respetar el plan alimenticio

Entre más apego haya al plan alimenticio que indicó el médico, mejor se controlará el azúcar en sangre. Cualquier modificación, por pequeña que parezca, puede desestabilizar la glucosa de una persona, ya que en ocasiones, una receta o modo de preparación "esconde" el azúcar real que contiene el alimento, especialmente al combinarse con otros.

La importancia de la glucosa en sangre

La glucosa en sangre es esencial para el organismo, ya que es la principal fuente de energía para las células. Sin embargo, mantener niveles adecuados de glucosa en sangre es crucial para evitar complicaciones de salud. Los niveles altos de glucosa en sangre pueden dañar órganos y tejidos, lo que puede llevar a problemas graves como enfermedades cardiovasculares, neuropatía y daño renal.

Para prevenir la hiperglucemia y sus complicaciones, es fundamental mantener los niveles de glucosa en sangre dentro de un rango saludable. Esto se puede lograr mediante una dieta equilibrada, rica en fibra y baja en azúcares y grasas, junto con ejercicio regular y la medicación adecuada según las indicaciones del médico.

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Diferencias entre hipoglucemia e hiperglucemia

La hiperglucemia e hipoglucemia surgen cuando la glucosa está muy alta o muy baja, respectivamente. En ambos casos, esos picos al alza o a la baja, tienen consecuencias en la salud de la persona que vive con Diabetes.

La hipoglucemia se presenta cuando los niveles de glucosa en sangre están por debajo de los rangos normales, los síntomas pueden ser mareos, aturdimiento, fatiga, hambre excesiva, ansiedad, entre otros y se recomienda hacer una prueba con glucómetro para confirmar que el nivel de glucosa es bajo, para después consumir un carbohidrato de absorción rápida, una comida o refrigerio y volver a medir con glucómetro para asegurar que los niveles se encuentran en rangos normales.

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Si al medirse con el glucómetro se identifican picos muy altos o muy bajos de manera frecuente, es importante revisar la dieta y la dosis de medicamento con el médico para que haga los ajustes necesarios.

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Complicaciones causadas por la hiperglucemia en diabetes

Es importante prevenir al máximo la hiperglucemia, especialmente si es recurrente o por un largo periodo, ya que algunas de sus complicaciones son:

  • Enfermedades cardiovasculares.

  • Daños a los nervios, también conocidos como neuropatía.

  • Daño a los vasos sanguíneos de la retina, que puede provocar ceguera.

  • Problemas en los pies causados por nervios dañados o un flujo sanguíneo, puede causar infecciones en la piel que en casos graves lleva a la amputación.

  • Infecciones en los dientes y encías. La cetoacidosis es una complicación grave de la hiperglucemia.

La hiperglucemia puede llevar a la acumulación de cetonas en la sangre y orina, lo que puede resultar en complicaciones graves como la cetoacidosis diabética.

Consejos para vivir con hiperglucemia

Si vives con hiperglucemia, seguir estos consejos puede ayudarte a manejar la condición de manera efectiva:

  • Mantén una dieta saludable y equilibrada: Incluye alimentos ricos en fibra y bajos en azúcares y grasas. Evita los alimentos procesados y opta por opciones naturales y frescas.

  • Realiza ejercicio regular: Actividades como caminar, correr o practicar yoga pueden ayudar a controlar los niveles de glucosa en sangre.

  • Toma tus medicamentos según las indicaciones de tu médico: La adherencia al tratamiento es crucial para mantener los niveles de glucosa bajo control.

  • Monitorea tus niveles de glucosa en sangre regularmente: Utiliza un glucómetro para asegurarte de que tus niveles se mantienen dentro de un rango saludable.

  • Evita el estrés y la ansiedad: Estas emociones pueden aumentar los niveles de glucosa en sangre. Practica técnicas de relajación como la meditación o la respiración profunda.

  • Considera trabajar con un dietista o un educador en diabetes: Ellos pueden ofrecerte consejos personalizados sobre cómo manejar la hiperglucemia y mejorar tu calidad de vida.

Siguiendo estos consejos y manteniendo una comunicación constante con tu médico, podrás manejar la hiperglucemia de manera efectiva y llevar una vida saludable.

En resumen, ¿cómo evitar la hiperglucemia?

Mantener los niveles de glucosa en sangre dentro de los rangos normales es posible siempre y cuando se mantengan hábitos saludables en términos de alimentación balanceada y ejercicio regular. También, es muy importante monitorear la glucosa frecuentemente para identificar cualquier aumento y actuar de inmediato.

Asimismo, se recomienda cultivar el hábito de tomar el medicamento, cuando este sea prescrito por un doctor en los horarios recomendados, así como evitar tomar remedios caseros que podrían poner en riesgo la salud de la persona.

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